Grupo Investigación Insólita

Cuando el amigo se convierte en Judas

Los enemigos, de esos miles. Siempre creemos que son cuatro gatos, pero no, no siempre es lo que parece y el que menos te piensas «te pega el palo». Ya a Jesús les paso con Judas, por eso hoy en día solo existen judas en todas partes tristemente. Creo que, es evidente que los más inteligentes y la gente auténtica de todos los planos posibles, no tienen muchos amigos o solo los cuenta con una mano y podría decir, que le sobrarían dedos, esos son los auténticos. 

Hace mucho que algunos se marcharon porque intentaron hacer daño, tocar la fibra, hacer caer tu ser al suelo, pero nunca podrán, pues uno es inquebrantable. Ahora bien, para saber y hacer, primero se tiene que leer —cosa que muchos ni eso—. Para llegar aún sitio o saber cómo un maestro, primero leer, entender, aprender y crecer. Pero no, la gente quiere todo ya y eso no es así, por ello, a los enemigos o esos que dicen ser tu amigo —no tienen la materia suficiente— para llegar a donde nunca llegaran y es a tu lado.

Es evidente que existen muchas ligas y solo unos pocos pueden llegar a la tuya, a tu vida, a tu corazón —y eso que se le dio todo y se le ayudó— es normal que la gente sea desagradecida. Para los malos momentos no existe inteligencia humana, pero cuando es al revés si tienes que estar. Al parecer y por lo que dicen algunos: «nos tomó el pelo a todos y parecía tonto». Como me dicen: «tengo que escribir esto o reviento, sé que no lo leerá, pero es normal, en su vida no abrió un libro y ahora va de maestro por la vida». Por esta parte puedo entender a la persona que me paso el escrito, pero es evidente que muchas malas personas pueden sacar de quicio al más pintado, pero si, no vale la pena dar tiempo y fama a alguien que ni sabe atarse los cordones de los zapatos. 

«Existen momentos que cuando te das cuenta de que te tomaron el pelo, es cuando revientas de rabia, pero no vale la pena de dar la fama y tiempo al tonto del pueblo y encima, no lo sabe»

Ya le comenté que no vale la pena, haz tu vida y deja a los demás que hagan lo que quieran, al final no saldremos vivos de esta vida, ¿para qué perder el tiempo? ¡Vive! Ahora que él haga y si vuelve, ya no estarás para él. Mismamente, es así de claro, no podemos perder el tiempo en tonterías porque tenemos otras más importantes y es vivir, el amor, las personas que nos aman y las que no, puerta. Eso sí, si salen por la puerta que sea al completo, pues si se quedan a medio camino molestan para poder pasar. Existe un dicho que dice: «si se para tras de ti, protégelos, si se paran a tu lado, ayúdalos, pero si se paran frente a ti, no tengas piedad».

Siempre he dicho una cosa, nos quejamos de la Covid y lo contagioso que es, pero la estupidez humana o la lerditis es aún más, cada día existen más y eso no tiene cura. La lerditis es evidente que es: «Inflamación de la masa encefálica por estupidez humana sin remedio». No nos cabreemos y busquemos la zona de buenas vibraciones y siempre reír, ahora bien, el que viva en baja vibración y odio, ese veneno le seguirá toda la vida y si espera hacer daño al otro, eso es como sostener un carbón encendido «esperando que el otro se queme». 

Ahora al parecer se lleva unos años el judas o maestro sin dar síntomas de vida, el catedrático que nunca abrió un libro y fue a la biblioteca donde solo miraba comics —los dibujos— y la víctima de traición seguirá viviendo bien con nuevo amor, eso, me alegra. Todos en la vida tenemos el derecho de ser felices, pero hay quien vive en un tormento continuo porque no sabe o está en bucle y solo algún día se dará cuenta de lo que perdió todo, amigos y familia. Pero si, nunca es tarde o si, según la edad o en el lecho de muerte, que es cuando todos o casi todos se arrepienten de las cosas. Suerte.  

Seguimos viviendo.

Miguel Ángel