Grupo Investigación Insólita

Sociedad mediocre con sus juicios y estereotipos

Hoy volvemos a ver cosas que no se entienden y como se juzga sin saber nada de nada. La gente habla sin saber y la gente no lee, y menos, documentarse. Qué triste hasta donde se llega y como se tacha a todos por igual —generalizando—. Cierto que, cada vez uno se cansa más de estar viviendo con lomos plateados y parlantes. No entiendo cómo es posible, como hacen las cosas sin saber y menos, documentarse. ¡Vaya cabezas! Está muy claro que hoy en día se está en niveles preocupantes de gente sin sesos y sin leer. Así nos va. Ya, por ejemplo, me estoy cansado de estar en grupo donde la no participación llega a temas enfermizos, es decir, llegan a un alto cargo de ego que conmigo no va. No se puede juzgar a la gente por no participar y por incluso, no asistir a eventos. ¡Señores, la gente tiene sus vidas! No entiendo cómo pueden machacar a la gente que no participar y menos, tener que estar leyendo textos con mucho ego —al final me voy saliendo de los grupos por ser vomitivo—. Qué pesada la gente. 

«Por qué a la gente le gusta hablar de lo que hace y hacer ver que ellos hacen y los demás no. No entiendo nada y no entiendo como puede ser la gente tan vanidosa. Haz y sigue, deja a la gente tranquila»

Las cosas o las tareas se hacen sin que nadie lo vea, no hace falta. Otros, si lo hacen, les gusta mirar a todas partes para ver si alguien le ve y sepan lo bueno que es. También se fijan que hacen los demás y quién no. Así dan novedades de los que no hacen nada y esos son los que dicen o critican en los grupos diciendo que no hacen, no participan, no asisten, no dejan sus cosas o familia por venir, etcétera. Vamos, solo hablan veneno y son claramente son tóxicos. 

Realmente tengo un poco de asco al ver gente así. Incluso, otras de las cosas que he visto son personas en masa maltratando a otros o a una sola persona. Una persona que, como bien sabemos, existen muy dóciles y muy buenas, de las cuales se les toma el pelo. El grupo se ríe de él y la verdad que me da mucha tristeza que exista gente de tal calibre. Por ello, en los grupos de WhatsApp, cuando empiezan, así como comenté anteriormente, me suelo salir o directamente lo silencio.

El ego está a la orden del día y cada día, peor. No entiendo ni entenderé por qué la gente es así y sí, da mucho asco. Gente de tal calibre machaca a los más débiles y encima van de machotes diciendo en grupos o redes sociales que la gente del equipo hacen poco y cuando este personaje lo hace, siempre hace que los demás lo vean para ser más vanidoso de lo que es, vamos que, un parásito en toda regla. 

«El vanidoso tóxico siempre hará las cosas para que los demás lo vean y dárselas de máximo, cuando no lo es. Así son, pero sí, cada día existe más en esta vida»

Si en estos casos os lo encontráis en por ejemplo grupos de WhatsApp no hagáis caso y que no os moleste. Si atacamos sin saber si se refieren a nosotros, será un punto a favor al tóxico por sentirnos aludidos. Mientras no digan nuestro nombre, mejor no hacer nada y que a él se lo coman los demonios con sus comentarios. A mí, como os digo, me ha pasado y la verdad que no hago nada, solo que leo y me defraudo por la clase de gente que hoy en día tenemos en la sociedad. Si por lo que sea ocurre que como nadie dice nada y ataca, eso ya es otro cantar. Muchos se creen que hacen muchas cosas y critican a los demás por qué no hacen nada, pero tenemos que ser respetuosos porque no todos tenemos la misma vida y obligaciones. 

Si nos atacan, nosotros con toda la artillería tenemos que hacer lo mismo. Estos parásitos se les tiene que frenar porque son los que se suben al carro de muchas personas y, sobre todo, suelen adquirir cargos más altos por ser como son y lo que son, parásitos tóxicos —el que vale, vale y el que no, para jefe—. Existe un dicho que dice: «Si se colocan a tu lado, camina con ellos y juntos ayudaros, si se colocan tras de ti, defiéndelos y protégelos en el camino, pero si se ponen frente a ti… Si piedad». En fin, lo dejaremos aquí, pero como os digo, que nadie os someta. Vivir al día y a tope y a quien no le guste, que siga su camino. 

Saludos a todos.

Miguel Ángel