Meditar, pedir y a ver. Siempre pendiente de las señales

Un ambiente raro me propongo hacer una meditación para ver que llega. Un día raro y en un rato que estaba solo pensé en hacer una meditación de las mías. Esas meditaciones de horas, pero en este caso no pude estar tanto como quise, pero tengo claro que las próximas sí lo haré. Es evidente que, cuanto más rato está uno meditando, más cosa se ven. Pues bien, esta mañana ya me levanté raro con sueños raros que, no tienen ni pies ni cabeza. No sé qué tratan de decirme o incluso, ni quieren que sepa de momento, pero está claro qué, raro es.
Ya una vez que me levanté, me puse hacer cosas en casa y el día transcurría raro. Decidí al final hacer una meditación para ver si veía algo en claro y más con la que está cayendo en el mundo y el conflicto de Rusia y Ucrania. Pero en la meditación no lo veía claro y costo entrar en trance, pero seguí. Cuando nos pasa eso, tenemos que dar tiempo para entrar y disfrutar de lo que vemos. Muchas veces no tiene sentido con lo que vemos, pero, aun así, tenemos que seguir en disfrutar de dicha meditación. De eso se trata, de disfrutar. Cuando hacemos mucho rato, cargamos energía y va muy bien, para la Salud.
“La meditación es la clave de la vida y la salud. quien la práctica, sabe bien de lo que digo. Incluso podemos ayudar a otros con la energía”
Pues en el transcurso de la meditación, vi aguas de color lila y verdes —como si fueran auroras boreales—, cuando eso pasa ya más o menos se empiezan a ver cosas y ya te vas navegando a lugares. Pedí ver e ir a sitios referentes a mi pregunta y costo ver cosas. Recuerdo que, vi un paisaje algo oscuro. Entendí que era de noche y el prado era de hierbas altas movidas por él viendo y bajé de arriba, es decir, desde el aire al estar flotando. Vi siluetas de montañas a ser de noche y esos prados de hierbas moverse por la brisa. Me causo algo extraño, no vi a nadie ni pueblos ni casas. ¿Dónde está todo el mundo?
No pude estar mucho rato porque pronto la familia volvería a casa y tenía que preparar la cena. Pero tengo claro que, volver hacer más veces porque va bien y sobre todo obtener más información. Hoy ya tengo claro que, cada vez que tenga un rato, usaré ese tiempo para hacer meditaciones e ir publicando aquí lo que experimente. Recuerdo también que antes iba con grupos de meditación para hacer en grupo, pero últimamente, existe mucho ego. Cada día la gente quiere ser el punto de atención olvidando con su ego, su esencia. Por ello, ya no asisto y no hago nada con nadie. Mejor, por en solitario y disfrutar de tu paz —yo por lo menos—.
“Los eventos sociales y colectivos, existe mucho ego. Si en la vida te pasa, lo mejor, es caminar solos y que la vida nos sorprenda. Es lo mejor”
Lo curioso, lo oscuro que era todo en la meditación y nadie por ninguna parte. Era un escenario extraño, hierbas y montañas, ¿qué lugar era ese y por qué llegué ahí? Lástima no estar más rato, por ello cuanto más estemos en la meditación, mejor. Seguro que, si llego a estar más, algo más en claro sacaría. Lo bueno de todo es que me vi arriba y desde arriba vi la hierba moverse por la brisa del aire. Los relieves de las montañas iguales, altas y oscuras. Nada tenía sentido o es que me querían decir algo del lugar para cuando llegue algo malo, tener una ubicación segura, ¿podría ser? ¿Llegará la guerra? Espero que no.
Para acabar, si miráis la imagen del artículo, en lo que parece un ojo, así es como se empieza a ver las cosas al tener los ojos cerrados. Justo en lo negro se hace grande y se empieza a ver cosas. Cuando eso ocurre, es cuando tenemos que estar al tanto de las imágenes y pedir donde ir o pedir información —llega de verdad—. Poco más. Lo dejamos aquí y pronto más noticias.
Sin más, me despido.
Saludos a todos.
Miguel Ángel
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