Grupo Investigación Insólita

Hungría: heridas por ovnis

HERIDAS INUSUALES CAUSADAS POR OVNIS
László Kiss – HUFON (Red Húngara de OVNIs), 1992

Es bastante frecuente que las personas que han vivido encuentros cercanos experimenten fenómenos recurrentes o, por el contrario, que les sucedan hechos extraños. También es común que aparezcan cambios visibles y/o psicológicos, o heridas, aunque estas puedan desaparecer tarde o temprano.

Este tipo de efectos ocurrió en el caso de una mujer de 50 años que vivía en Mezőberény. Durante el primer encuentro, fue visitada por un ser no deseado el ¿? de enero de 1992 (la fecha exacta es incierta).

Ese día, la testigo se encontraba con su esposo en la cocina de su casa, cuando una «cosa» negra opaca, de unos 100 a 120 cm de altura, con forma de huevo y aspecto ondulante, cruzó la cocina hacia la habitación contigua.
Mientras se desplazaba, se escuchó un fuerte sonido de resoplido o una voz extraña, y la parte superior del objeto se volvió gris azulada, dejando ver una franja vertical naranja y vibrante.

Al lado de esta franja, apareció una mujer hermosa que la miraba. Aunque la testigo se sentía físicamente bien, no podía hablar con su esposo. Entonces siguió a la entidad hacia la otra habitación, pero no encontró a nadie.

Le contó a su esposo lo que había visto, pero él no le creyó. (En otro caso, una mujer habría observado un ser similar cerca de Sátoraljaújhely). El fin de semana transcurrió sin más incidentes.

El siguiente encuentro
Sin embargo, el lunes siguiente, se sintió muy cansada y se fue a acostar a las 18:30, mientras su marido veía la televisión en la misma habitación. De repente, oyó una voz femenina que le dijo:

“¡Levanta el brazo!”

Obedeció, y sintió un dolor agudo en el codo. Luego se le ordenó que saliera al jardín, en camisón y descalza. Allí, vio un objeto en forma de huevo, parecido a una cabina, posado en el jardín. Entró en él: no parecía haber nadie, pero sentía una presencia.

La siguiente imagen que recuerda es la de una gran sala clara y gris, con una puerta visible al fondo. Dentro había muchas personas:

10 a 15 niños de entre 10 y 13 años a la derecha,

8 a 10 mujeres de unos 50 años a la izquierda.

Todos estaban desnudos, y la testigo también lo estaba, sin recordar en qué momento se le quitó el camisón.

En esa sala, reconoció vagamente a una mujer que conocía. Se miraron durante un rato, pero no pudo recordar exactamente quién era.

(Un evento similar ocurrió a una joven en Kiskunfélegyháza: habría reconocido a una compañera de clase entre los niños abducidos. Ambas chicas presentaban una herida en el mismo lugar del cuerpo).

La testigo cruzó la sala hacia la puerta, pero al llegar, no pudo ver nada [¿zona en sombra? – nota del editor].

Cuando recobró el conocimiento, estaba de nuevo en su cama, en camisón, y sentía dolor abdominal. Eran las 21:30, y su esposo seguía viendo la televisión. Curiosamente, no notó nada fuera de lo normal.

A la mañana siguiente, aún sentía dolor y presión leve en la parte superior del abdomen, pero pudo trabajar normalmente durante todo el día, aunque se acostó temprano otra vez.

Las heridas en el abdomen
Extrañamente, el incidente se repitió de manera idéntica el martes y el miércolessiguientes.
Luego, el jueves y el viernes, aparecieron grandes manchas rojas en la parte superior del abdomen y en la parte inferior del pecho.
No sentía dolor ni picazón, y las marcas no eran sensibles al tacto ni a la temperatura.

En cambio, en los brazos, justo encima de las venas, en la parte externa de los codos, apareció una herida con cuatro marcas visibles de punción. Estas eran sensibles a la presión, lo que causaba una sensación de ardor que duró tres semanas.

Además, su respiración era ruidosa y dificultosa, y el fuerte sonido de resoplido que producía sorprendió a su familia.

Consulta médica
Una semana después del incidente, fue a consultar a su médico, a quien le contó lo sucedido y le mostró las heridas.

El médico jefe, que nunca había visto un caso así en toda su carrera, la remitió a un especialista en dermatología (nota del editor: ¡IBMA, hay que anotarlo y adoptarlo!).

Pero la crema prescrita no fue eficaz. De los síntomas inflamatorios, solo era visible el enrojecimiento: no había secreción.
Sin embargo, su estado de salud general mejoró notablemente, y su capacidad de trabajo aumentó considerablemente: ahora podía trabajar sin cansarse.

Sus várices en las piernas desaparecieron, y un problema en el oído izquierdo se curó completamente, hasta el punto de que ahora podía oír perfectamente con ese oído.

Evento del 11 de febrero a las 3:30 de la madrugada
Dos semanas después, hacia las 3:30 a. m.del 11 de febrero, ocurrió un nuevo episodio:

La testigo se despertó y vio a su esposo en una postura extraña: tenía el brazo levantado y sostenía la manga del pijama con la otra mano, como si esperara que le extrajeran sangre o le pusieran una inyección.

No pudo despertarlo, así que volvió a colocarle el brazo bajo las cobijas. Curiosamente, su marido ocupaba en la cama el lugar que usualmente tomaba su esposa.

LOS MISTERIOSOS CÍRCULOS EN LOS CAMPOS TAMBIÉN APARECIERON EN HUNGRÍA
Gábor Tarcali – 8 de diciembre de 1992

Desde la década de 1960, en muchos lugares del mundo han aparecido círculos y figuras de origen desconocido en campos de cultivo. Primero en Inglaterra, luego en Estados Unidos, Japón, Italia, Canadá, etc.
Hasta el día de hoy, los especialistas no saben explicar el origen de estos círculos y figuras.

Primeras apariciones en Hungría
Durante el verano de [1992], también aparecieron círculos en los cultivos de Hungría. El primero y más grande fue descubierto el 21 de junio cerca de la ciudad de Székesfehérvár, en un campo de trigo perteneciente a la empresa agrícola Aranybulla, por László Ötvös, piloto del servicio aéreo Aerocaritas.

El círculo medía 36 metros de diámetro y era perfectamente circular.
Dentro del círculo, los tallos de trigo estaban tumbados en el suelo en forma de espiral, girando en sentido contrario a las agujas del reloj.
Los tallos no estaban rotos, los granos permanecían en las espigas, y no se encontraron huellas dentro del círculo.

Además, el nivel de radiactividad medido dentro del círculo era superior al normal.

La noche en que se formó el círculo, varias personas cerca del cine al aire libre contiguo observaron fenómenos luminosos no identificados sobre el campo de trigo.

Multiplicación de círculos
Al día siguiente del descubrimiento del gran círculo, se encontraron otros círculos en el campo:

uno de 1,7 m de diámetro,

y dos más de 1,5 m.

Pocos días después, aparecieron nuevos círculos, incluyendo uno de 10 metros de diámetro, dentro del cual se halló una figura triangular.

Otros lugares de aparición en Hungría
Círculos similares también aparecieron en otras regiones del país:

En Döbröntepuszta, cerca del pueblo de Ozora, en el condado de Tolna, se descubrió un círculo de 13 metros de diámetro.
Una fuerza desconocida parecía haber aplastado los tallos formando un círculo regular.
La noche anterior, Ferenc Kranicz, guardabosques local, vio una bola roja descender lentamente hacia el suelo.

En Mezőszentgyörgy, en el condado de Fejér, se encontraron tres círculos.

En Úrgevár, en el mismo condado, se hallaron seis círculos más, y otros ocho en Tárkánypuszta.
El más grande de ellos medía 12 metros de diámetro.

En Bicsérd, se encontró un gran círculo de 12 metros rodeado de varios círculos más pequeños.

Caso en la vecina Eslovaquia
También recibimos información desde Eslovaquia, país vecino de Hungría.
Cerca de la frontera, unos trabajadores agrícolas descubrieron un círculo en un campo.

En Šíd, en los terrenos de la corporación agrícola de Fiľakovo, apareció un círculo con dos anillos concéntricos (ver dibujo más abajo).
El diámetro total era de 8 metros, con anillos de 1 metro y 2 metros de ancho respectivamente.

Hechos destacables
Se destacan claramente varios hechos:

La perfección geométrica de los círculos.

Los tallos no estaban rotos.

No se hallaron huellas dentro de los círculos.

En el caso del círculo de 36 metros, la superficie afectada era de 1000 m².
Para pisar esa área manualmente, alguien debería caminar unos 22 000 km.

Se detectó radiactividad superior al nivel normal dentro de los círculos.

Otros círculos y figuras han sido encontrados en diversos lugares de Hungría y del mundo a lo largo de los años.

Conclusión
Estos hechos sugieren claramente que los círculos no pudieron haber sido creados:

ni por seres humanos,

ni por animales,

ni por fenómenos meteorológicos.

Aquí archivo en inglés descargable.

Francois Garijo.

https://world-ufology.blogspot.com/

Si sabéis francés, aquí os dejo un vídeo de Francois Garijo y su hija.