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Trump, Kushner y la cuenta regresiva profética

Editorial- Trump, Kushner y la cuenta regresiva profética: paz, traición, guerra… y el astro que detiene la extinción (2027)

El mundo se ha vuelto demasiado rápido para que lo expliquen solo los titulares. Cuando los diarios anuncian “alto al fuego” o “paz histórica”, conviene revisar detrás de la foto. Porque lo que parece acuerdo puede ser simple transición, lo que parece tregua puede ser solo el respiro antes del rugido. Y en medio de todo, hay nombres y fechas que encajan demasiado bien con la arquitectura bíblica del fin: Donald J. Trump y Jared Kushner.

Lo que sigue es la radiografía completa: datos biográficos, maniobras diplomáticas, antecedentes familiares, tensiones económicas y geopolíticas, cruzados con los textos proféticos de Daniel, Apocalipsis, Ezequiel, Isaías, Mateo y Tesalonicenses. Todo desemboca en una hipótesis brutal: la paz es momentánea, la traición inevitable, la guerra inminente y la caída de un asteroide en 2027 será la única fuerza capaz de frenar la extinción total.

1. Fechas y biografías que marcan el tablero

Donald J. Trump, nacido el 14 de junio de 1946, irrumpió en la geopolítica con un sello: declararse defensor incondicional de Israel. No fue solo discurso: el 6 de diciembre de 2017 reconoció a Jerusalén como capital, y el 14 de mayo de 2018 trasladó allí la embajada de EE.UU. Actos concretos que alteraron el equilibrio de Medio Oriente.

Jared Kushner, nacido el 10 de enero de 1981, hijo de Charles Kushner y casado con Ivanka Trump, creció en una familia judía de peso económico y político. Como asesor de la Casa Blanca, fue el arquitecto del acuerdo conocido como Abraham Accords, firmado el 15 de septiembre de 2020. Con ello se erigió en pacificador diplomático, diseñador de tratados que unieron a Israel con Emiratos Árabes, Bahréin y otros países árabes.

La dupla está servida: un líder carismático y visible, capaz de mover multitudes (Trump), y un estratega frío, constructor de pactos (Kushner). En clave profética: la bestia y el falso profeta, el ejecutor y el diseñador.

2. Secuencia de hechos recientes

2017–2018: Jerusalén reconocida como capital y embajada trasladada.

2020: Firma de los Abraham Accords.

2024–2025: Récord de visitas judías al Monte del Templo, activismo pro-tercer templo y tensiones religiosas.

Octubre 2025: Israel y Hamas firman tregua y realizan intercambio de prisioneros. Los titulares hablan de paz, pero la geopolítica muestra una calma frágil.

2025: Auge de sanciones y aranceles como armas de presión económica, ensayo claro del “no comprar ni vender” sin aceptar reglas impuestas.

2026 (proyección): Ruptura de pactos, traición política y aislamiento de Israel. El preludio de la gran guerra.

2027: Impacto de un asteroide, evento cósmico que interrumpe la escalada bélica y La Gran Guerra, evita la extinción humana total.

3. El Monte del Templo: detonador espiritual y político

Los evangelios hablan de la “abominación desoladora” (Mateo 24:15, Marcos 13:14). Tesalonicenses 2:4 describe al “hombre de pecado” que se sienta en el templo de Dios como si fuera Dios. En 2024-25, los movimientos por la construcción del Tercer Templo y las visitas de alto perfil al Monte sugieren que este escenario está más cerca que nunca. Cualquier intento de profanación o imposición ritual allí encendería la mecha del Apocalipsis.

4. La economía como marca

Apocalipsis 13:17 dice que nadie podrá comprar o vender sin la marca de la bestia. Hoy, el equivalente es claro: sanciones, bloqueos bancarios, sistemas digitales de control financiero. Trump, con su uso agresivo de aranceles y sanciones (2018–2025), mostró el modelo: el comercio como arma y como filtro ideológico. Si el sistema se consolida, la marca dejará de ser metáfora para convertirse en condición real de supervivencia económica.

5. Geopolítica: Gog, Magog y las alianzas actuales

Ezequiel 38–39 describe a Gog y Magog aliados con Persia (Irán) y Togarma (Turquía). Hoy esas alianzas son visibles: cooperación militar Rusia-Irán, presencia turca en la región, milicias en Siria, Gaza y Líbano. Si Israel es traicionado por su supuesto protector, quedará expuesto a esa coalición. El camino al Armagedón no sería alegórico: sería literal.

6. Roles en clave profética

Trump (potencial falso profeta/bestia visible): el líder carismático que concentra lealtades y usa la economía como marca.

Kushner (potencial Anticristo): el pacificador que confirma pactos, el arquitecto de la paz engañosa, el que legitima un orden global que después se volverá coercitivo.

Las piezas encajan: el rostro público y el cerebro oculto.

7. Profecías y correspondencias

Daniel 9:27: Pacto con muchos → Abraham Accords y treguas actuales.

Apocalipsis 13: Dos bestias, marca de control → Trump y Kushner, sanciones y comercio.

Mateo 24: Abominación desoladora → Monte del Templo en riesgo.

Ezequiel 38: Gog y Magog → Rusia, Irán, Turquía y aliados.

1 Tesalonicenses 5:3: “Paz y seguridad… destrucción repentina” → Tregua de 2025.

Isaías 28:15: Pacto con la muerte → acuerdos que no aseguran nada.

8. 2026: traición y guerra. 2027: el asteroide

El Apocalipsis habla de traición y guerra final. El año 2026 aparece como el punto donde el pacto se rompe y se enciende la Tercera Guerra Mundial. La humanidad quedaría atrapada en la tormenta: Israel aislado, coaliciones activadas, potencias en choque directo.

Pero el 2027 trae el elemento extraordinario: la caída de un asteroide. No como fin del mundo, sino como único freno posible a la locura bélica. La destrucción física, ecológica y logística obligará a detener la guerra. No por virtud de los líderes, sino por imposición de la naturaleza. Será la interrupción brutal que salvará a la humanidad de su extinción total, pero a un costo incalculable.

La paz actual no es la paz verdadera. Trump y Kushner no son solo políticos: son los arquetipos de las figuras apocalípticas descritas hace siglos. El pacto que ofrecen será roto. La traición conducirá a la guerra. Y solo el impacto del asteroide de 2027 podrá frenar el fin total de la humanidad.

No es ficción. Son hechos, fechas, profecías y una línea de tiempo que ya corre. Lo que parece política es teología en acción. Lo que parece diplomacia es Apocalipsis en cámara lenta.

La cuenta regresiva ya empezó.

Fuente : RRSS. EJS. 2025